No sabemos cuándo fue su primer baile, ni cuando ha sido el último hasta ahora. Pero es evidente que le gusta el baile. La obra de Isabel Muñoz gira en torno a la persona, más concretamente en torno a los cuerpos de las personas. Por eso el baile es una constante en su fotografía, el baile, el movimiento, la danza (que no es exactamente lo mismo que el baile), el ritmo, el movimiento, el sexo, la sensualidad. Esa magia que hace que cada cuerpo sea un grito de vida.

Isabel Muñoz estudia fotografía en Madrid y en Barcelona, posteriormente en Nueva York. Su primera exposición es en 1986, y en 2016 recibe el Premio Nacional de Fotografía. Entre una fecha y la otra media toda una vida de trabajo y aprendizaje, de experiencias. Ha viajado por todo el mundo, fotografiando y exponiendo su obra. Mirando y viendo la belleza y el horror. 

En estas pocas imágenes están presentes Camboya, Brasil, Cuba, España, Argentina… Muchos cuerpos, mucho ritmo y mucho baile.